En España estamos acostumbrados a dilapidar ingentes cantidades de dinero que no tenemos en aeropuertos fantasma y monumentos inútiles a mayor gloria del ególatra de turno. Un poco como el Emperador y la Estrella de la Muerte, con un coste casi inconcebible, construida por una subcontrata, y escatimando en seguridad, en salud y en proteger un estúpido conducto de ventilación.
¿Cuánto costaría construir la Estrella de la Muerte? Es una pregunta tan transcendente como cuánto tiempo podríamos sobrevivir dentro del cadáver de un Tauntaun, si un jedi podría atravesar a Superman con un sable de luz o si la Estrella de la Muerte podría destruir la Tierra. La respuesta la tienen en Centives, donde hacen una estimación basándose en el precio de los materiales.
Teniendo en cuenta que la primera Estrella de la Muerte tenía un diámetro de 140km, sólo 25 veces menos que el de nuestra Luna, si asumimos que el metal utilizado es el acero, y suponemos una densidad de acero similar a la de un portaaviones moderno, obtenemos que se necesitarían 1 080 billones de toneladas de acero. A precios de 2012, este material estaría valorado en la disparatada cifra de 852 000 billones de dólares, que, para hacernos una idea, es 13 000 veces el Producto Interior Bruto de todo nuestro planeta.